Mérida, Emerita Augusta ciudad del imperio

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Hola mis viajeros, como es costumbre en estas épocas invernales, vamos a hacer un poquito de turismo interior, vamos a visitar una ciudad muy famosa desde el Imperio romano, acompáñame a descubrir Mérida y sus secretos. Vamos a ver qué hacer en Mérida en un día.

Descubriendo Mérida.

Los viajes son como piezas interminables de un rompecabezas que se va conformando con el tiempo.

Después de llegar de Edimburgo, queda esa sensación de querer descubrir más tu propio país, con lo que los tiempos empiezan a acelerarse.

Esta mañana, junto con Verónica, Roberto y Carlos Lorite decidimos ir a Mérida a descubrir sus secretos.

Situación de Mérida:

Mérida se encuentra situada en la región de Extremadura, en un lugar privilegiado, entre los cauces de los ríos Guadiana y Albarregas.

En pleno Valle del Guadiana, y entre las provincias de Cáceres y Badajoz.

Un poco de Historia de Mérida.

Como bien sabéis los que me leéis soy un apasionado de la historia, y por esa razón tengo que buscar esa parte antes de visitar un lugar, así que vamos con ello.

Mérida es y ha sido una de las ciudades más importantes en la historia de la Península Ibérica, de hecho en los libros de texto se nos habla de ella en muchas Ocasiones, pero no todo empieza con el imperio romano y su Emérita Augusta.

Ya en la prehistoria, se han obtenido informaciones de grupos que vivían en la zona, cerca de los ríos Guadiana y Albarregas, los cuales se asentaron aquí mucho tiempo atrás.

Dejando muestras de su presencia como este dolmen y las pinturas rupestres de las que Mérida se va ilustrando y haciendo hueco en la historia, hasta la llegada de los romanos.

Fundación de la Ciudad.

La ciudad de Mérida, se fundó hacia el año 25 a.C, por orden del Emperador Octavio Augusto, para que los soldados que se retiraban de las legiones tuvieran un lugar donde descansar.

La ciudad se fundó con la condición de que las poblaciones de estos soldados, y las poblaciones indígenas convivieran pacíficamente en la ciudad, y claro al final se mezclaran.

Esta situación de Mérida, le permitió crecer tanto que se convirtió en uno de los principales puntos de referencia del Imperio Romano.

Capital de la provincia de Lusitania, conoció el esplendor en esa época, teatro, anfiteatro, circo, acueductos, templos, puentes…Emérita Augusta comenzó a convertirse en Mérida.

Posteriormente a estos romanos que dejaron su huella en la ciudad, creando un lugar increíble más allá de las fronteras romanas.

Cuando los pueblos germánicos llegaron a la ciudad, Emérita Augusta las incursiones en Mérida se sucedieron, hasta que los suevos se establecieron en ella.

Los visigodos la nombraron capital de su reino y por lo tanto de España, con lo que Mérida seguía siendo un lugar importante dentro del imperio.

Después los reyes católicos, cuando fundaron varias ciudades en Las Américas, las nombraron con el nombre y en honor de la vieja Emérita Augusta, Mérida en Yucatán y Mérida en Venezuela.

¿Qué  hacer en Mérida en un día?

Mérida no es una ciudad muy grande, por lo que recorrerla en un día no puede suponer ningún tipo de problema.

Pero también tenemos que tener en cuenta que la ciudad de Mérida, tiene muchísimas cosas que ver por lo tanto, necesitaremos tiempo para poder realizar la visita.

Si hacéis como yo que pasáis gran parte del tiempo admirando los monumentos, la ciudad e incluso sacándole fotos a todo, el tiempo comienza a acortarse.

Por lo que necesitareis más de un día para ver la totalidad de los monumentos de la ciudad.

Por mi parte os voy a dejar con los más imprescindibles que observar, prometiendo volver algún día de estos para terminar mi visita.

Buscar aparcamiento.

Buscar aparcamiento no es difícil en Mérida, la ciudad tiene varios parking públicos que están bastante bien de precio, nosotros elegimos uno muy cercano a la comisaria de Policía.

El precio desde las 11:00 de la mañana hasta las 20:00 de la noche no nos costó más que 5,30€, algo que en mi opinión está bastante bien para tener el coche resguardado y sin problemas de multas.

Primer contacto con la ciudad.

Cuando llegamos a Mérida nos sorprendió la tranquilidad de la ciudad, una ciudad tan turística como ésta y estaba prácticamente vacía.

A pesar de ser domingo, y un día en el que normalmente los viajeros y turistas visitan las ciudades, nos sorprendió mucho que todo estuviera vacío.

Muchos bares de los alrededores estaban cerrados, con lo que el ambiente a esas horas estaba muy tranquilos.

El paseo por la ciudad fue uno de los puntos que tengo que resaltar, pues contemplar esta particular arquitectura extremeña, es una de las razones por la que me gusta visitar estas ciudades de mi vecina provincia.

Estos pequeños ratos de soledad en una ciudad tan bonita son algo que no tiene precio, y que descubres poco a poco, sin prisas. 

Información de interés en Merida.

En este pequeño apartado, quiero daros un par de consejos que os serán muy útiles a la hora de visitar la ciudad.

En primer lugar para sacar las entradas a los monumentos, solo tenéis que ir a uno de ellos, ya que se sacan las entradas para todos.

El precio de las entradas es de 15€ y tienen una caducidad de dos años, siempre y cuando no visites todos los monumentos.

Para empezar a descubrir Merida, lo ideal es empezar por el lugar más grande y al que más tiempo le vas a dedicar y posteriormente ir a los menos concurridos o más pequeños.

Comenzando la visita a Merida.

Arco de Trajano

La primera parada que hicimos en Mérida fue en la puerta de Trajano. En realidad más que puerta es un arco que se encuentra en el centro de la ciudad.

Este sitio es el primer punto de la ciudad en el que vimos algo de gente e incluso había una excursión guiada explicando los detalles de este lugar.

Este arco, construido se supone que por el emperador trajano o más bien en su honor, es un punto importante en la ciudad de Emérita Augusta, debido a su tamaño como a su función.

Este arco se supone que era el que marcaba el trazado del cardus maximus (una de las vías principales de las ciudades romanas) con el Rio Albarregas.

Con esta construcción se delimitaba la entrada a la ciudad de nivel más alto, dejando claro a que parte de la sociedad pertenecía cada uno.

Alcazaba de Merida.

Esta fortaleza, tiene como honor ser la más antigua fortificación que de la península ibérica.

Construida en el Siglo IX junto al puente romano de Mérida, tenía como objeto controlar una ciudad que se había rebelado contra el dominio de Abderramán II

Al llegar a la Alcazaba fue donde compramos nuestras entradas para visitar el resto de monumentos.

La importancia de esta fortificación que se encuentra junto al puente Romano de Mérida, hace que sea un lugar de imprescindible visita.

Dentro podemos ver restos de una vía romana, y de algunos lugares de interés que lamentablemente no pude observar por falta de tiempo, pero como dije antes prometo volver.

Zona Arqueológica de Morerías  

Aquí amogos es donde mi gen critico sale a la luz, tengo que decir que este lugar es un poco tesoro y pena al mismo tiempo.

Es un tesoro por que debe tener un gran valor arqueológico, pero es una pena por que se ha construido un edificio justo encima.

Con lo que la visita a este lugar es algo decepcionante, porque primero no está muy bien respetado en yacimiento, y segundo esta todo construido de muy mala manera.

Para más Inri, resulta que el edificio es de la Junta de Extremadura, con lo que el delito para mí es muy grave.

Si no queréis pasar a verlo tampoco os perdéis mucho, pero podéis hacer como yo y criticarlo en vuestras redes sociales a ver si así se dan cuenta del valor que tienen las cosas.

Templo de Diana.

Este lugar te lo vas a encontrar cuando sigas tu camino por la ciudad, la verdad que es un placer llegar desde cualquier lado y verlo de repente.

Las columnas y todo lo que engloba a este mágico lugar es un símbolo que debemos admirar durante un rato, así que aprovechad para sacarle unas cuantas fotos que merece la pena.

Hora de Comer.

Siguiendo las recomendaciones de una amiga, nos fuimos a comer a un sitio muy especial en Mérida, al Pestorejo.

Es un lugar realmente autentico, en el que el plato principal es un buen pestorejo asado, plato que nunca está de más y que te hace recobrar las fuerzas de momento.

El sitio es como un bar autentico de verdad en el que se entablan conversaciones alrededor de la barra, con un buen vino o cerveza.

Un sitio muy recomendable para visitar.

Anfiteatro Romano de Mérida.

Al llegar al complejo donde todo se tiene guardado, podemos descubrir de primera mano el teatro romano.

Ese lugar en el que los gladiadores dirimían las diferencias de sus amos, donde se negociaban los contratos y la política.

Un sitio que tiene todavía el olor a violencia impregnado en sus paredes, donde hombres luchaban por su vida.

Sentirte en este lugar al pisar la arena como uno de ellos es una sensación que siempre se revive cuando visitas un lugar de este tipo.

Aquí si tengo que decir que el buen trato se hace notar, habiendo dado al complejo la calidad que se merece.

Teatro Romano de Mérida.

Y si el anfiteatro estaba muy bien cuidado, que puedo decir del Teatro.

Este es el culmen de la visita a Mérida, si amigos y viajeros, este lugar aún conserva ese halo especial, y pese a las múltiples reformas, aun puedes sentir la magia aquí dentro.

Desde las gradas se ve toda la escena, es como si el tiempo no hubiera pasado por aquí, me imagino en mi interior las obras de teatro que se celebran aquí.

Porque es un sitio que se usa actualmente para representar obras clásicas, y eso sí que me llena de orgullo.

Junto al teatro podemos visitar las termas, y algunas de las casas que tenían los romanos más poderosos que se encontraban aquí.

Pasear por estos singulares sitios mientas contemplo las magníficas construcciones es algo que me llena de una satisfacción increíble.

Uno de esos momentos únicos que no se olvidan en la vida.

Casa de Mitreo.

Cuando buscábamos este lugar en mitad de la ciudad de Mérida, pensaba que al llegar iba a ser un sitio más espectacular.

Al llegar, pudimos contemplar una autentica villa romana, con sus habitáculos, sus grandiosos mosaicos y las áreas funerarias.

Para mi esta parte de la historia es un bien que tenemos que recuperar al máximo.

Llegar aquí me produjo unos sentimientos encontrados, por un lado estaba asombrado por cómo había sido todo y estaba siendo descubierto.

Por otro, sé que aún quedan muchas cosas que descubrir en estos parajes y espero que las descubran pronto.

Una última parada.

Como ya dije, el tiempo que tenia para descubrir la ciudad era corto, y se quedaron muchas cosas en el tintero para poder ver.

De hecho he prometido escaparme de nuevo para descubrir los lugares que me faltan.

El circo, el acueducto de los milagros, la basílica de santa Eulalia, y un largo etc…

Pero la noche se cernía sobre nosotros y teníamos que volver a recuperar fuerzas asi que nos decidimos por ir a un lugar llamado Amazzonico, un sitio increíble.

El lugar es una casona antigua, que tiene varias plantas y una decoración muy peculiar, el lugar perfecto para tomarse unos tés, compartir un momento de charla mientras escuchas buena música. Un sitio especial.

Mérida, prometo volver.

Aunque había bastantes cosas que no me gustaron por su estado de conservación, Mérida es un lugar que merece la pena.

Una ciudad muy importante que nos muestra esos rasgos de la historia que podemos vivir en primera persona.

Una ciudad muy bonita y tranquila en la que pasear se convierte en un placer para los sentidos, donde la gastronomía es un punto a favor.

Una parte de nuestro país que tengo que redescubrir más pronto que tarde.

“Un Saludo y nos vemos en el camino”

Pedro E. Juzgado

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