Queridos amigos de Turviaje, por fin volvemos a encontrarnos en estas líneas para mi visita al castillo de Belalcázar, el castillo con la torre más alta de la península ibérica.
Hace mucho que no nos veíamos en este espacio, y es que debido a mi nuevo trabajo y pluriempleo no me he podido pasar a contaros cositas por el blog, pero esa historia os la contaré algún día aquí.
Hoy vamos a hablar de mi ultima visita al castillo de Belalcázar, aunque también hablaremos del pueblo y es que a lo largo del tiempo ha sido muy importante, tanto en la historia como generando personalidades influyentes en la Córdoba musulmana.
Si quereis conocer el castillo castillo mas antiguo de españa aqui os dejo el link:
Baños de la encina, el castillo mas antiguo de España
Aquí os contare un poco de esa historia del municipio, de sus personalidades influyentes y sobre todo hablaremos del castillo.
Que encontrarás en este post
Belalcázar, un pueblo con una rica historia.
Prehistoria y edad antigua.
Aunque en la visita al castillo de Belalcázar no os cuenten mucho de la historia del pueblo, he decidido buscaros algo de información para que os hagais una idea de la importancia del pueblo.
El pueblo de Belalcázar y su entorno ha estado poblado desde tiempos prehistóricos, donde los primeros pobladores dejaron constancia de su presencia con la cantería y los objetos como lascas, cantos trabajados y petroglifos encontrados junto a los crómlechs sitiados a este y oeste del término municipal.
En la edad antigua, los túrdulos fueros quienes ocuparon el lugar, según el historiador Plinio el viejo, que dejo constancia de la beturia de los Túrdulos, de esta época se datan los hallazgos del siglo II A.C, unos restos de fortificaciones para la protección de estos pueblos.
Cerca de la ermita de la patrona de Belácazar, virgen de Gracia de la alcantarilla se encuentran restos de cerámicas, probablemente debido a la existencia de un lugar de culto.
El castro situado en el lugar conocido como la Solana es el más importante, y el que el continuo arado rompió más de veinte tinajas.
Existe una falsa creencia de que fueron los cartaginenses quienes fundaron el primer asentamiento, como he comentado anteriormente Plinio la sitúa en la beturia de los Túrdulos.
Posteriormente fue colonia o municipio romano, debido a las monedas, aras y lápidas encontrados aunque se cree que pudo ser un campamento fijo romano, por la forma de la fortificación y los fosos, dedicado a la extracción de materiales metalíferos.
También tuvo gran importancia la industria cerámica debido a la cercanía del rio.
Llegando ya a los visigodos quienes también se asentaron en la zona, se reconocen lápidas, antropomorfas, alguna tégula y nombres de lugares como el de los cerros de Sisenando.
Época Musulmana
Quizás sea esta la época más esplendorosa del municipio de Belalcázar donde nacen diferentes personalidades que tuvieron relevancia en la ciudad de Córdoba y en general en todo al-Ándalus.
Abd al-Rahman ibn Abd Allah al-Ghafiqi (valí de Al-Ándalus 721-723, 730-738):
En diferentes documentos que he encontrado incluida en la página web de Turismo de Belalcázar se cuenta que este personaje nació en la ciudad de Gafiq, como se conocía en época musulmana al municipio, otros muchos documentos dicen que en realidad nació en Hiyaz (Arabia Saudí) de lo que no cabe duda es que su nombre “al-Ghafiqi” esta relacionado con la ciudad importante de la época, Gafiq (Belalcázar), fue un importante guerrero que llevo a cabo campañas en Francia cuando los musulmanes quisieron avanzar hacia ella. Llevo a cabo operaciones importantes en todo el norte, acabo muriendo de fiebres en el año 738.
Obaidala ben Muza:
Fue un cadí (juez) de la Aljama de Córdoba, nombrado por Alhaken I su familia habitaba en Sevilla, agrega Aljoxani que “los hijos de Muza el Visir, pretenden que Obaidala es el patrono del que ellos tomaron el apellido, no se conocen más datos de este hombre.
Said b. Suleiman al Gafequi y su sobrino Suleiman ben Asuad al Gafequi:
Ambos también jueces de la Aljama de Córdoba, el primero nombrado por Abderramán II cuentan que cuando fueron a buscarlo estaba labrando tierras de su propiedad en el Llano de las Bellotas (los Pedroches) y que prometió ser tan duro como la madera de encina por una afrenta que le hicieron los curiales el día de su presentación, lo cumplió de tal forma que llevo a muchos de esos curiales casi a la ruina, su sobrino, Suleiman, también cadi de la aljama se enfrentó al emir Mohamed primero que entonces era Emir de Mérida, por una mujer que había sido vejada, el mismo Mohamed I cuando llegó a ser emir de Córdoba lo nombra juez de la Aljama cordobesa sucediendo a su propio tío.
Mohamed ibn Qassan ibs Aslan el Gafequi:
Probablemente uno de los personajes más importantes de la historia de Belalcázar: Al-Gafequi fue uno de los más famosos médicos oculistas que hubo en la Córdoba de la época musulmana. El público uno de los tratados de oftalmología que han estado vigentes durante más tiempo, casi 500 años hasta el renacimiento prácticamente.
Este hombre fue quien comenzó a operar cataratas de una forma novedosa, y es que antes de su invención las cataratas se curaban de una forma rudimentaria, golpeando el ojo, con lo cual había una alta probabilidad de perder el ojo.
Al Gafequi lo que hacía era rasgar el ojo y absorber la catarata con una pequeña caña hueca, método que fue evolucionando cada vez hasta tal punto que hoy se sigue haciendo así.
Reconquista Cristiana
Desde 1236 que entro Fernando III el santo en la ciudad, los habitantes de Belalcázar, entonces conocida como Gahete, propiciaron una gran resistencia concentrándose en el entorno del castillo de Belalcázar, antiguo alcázar musulmán que estaba amurallado.
No fue hasta 1241 cuando se cree se llevó a cabo esa reconquista, aunque las gentes siguieron viviendo en el entorno de la fortaleza hasta varios años después, Gahete no fue donada a Córdoba hasta 1243, y no es hasta 1272 cuando se asignan los términos jurisdiccionales de Belalcázar.
No es hasta 1450 ya cuando la ciudad está en manos de Gutierre de Sotomayor cuando comienza la construcción del castillo de Belalcázar, un castillo que es símbolo y emblema del municipio.
Castillo de Belalcázar, una fortaleza inexpugnable.
Comenzamos la visita al castillo de Belalcázar, una fortaleza inexpugnable.
Aunque como hemos visto, el municipio de Belalcázar tiene una gran historia y no he contado todo en este post, nuestra visita se centra en el castillo, aunque hay más lugares que ver en este pueblo y al que seguro tengo que hacer otra visita. Quiero contaros sobre la que he realizado hace poco a este maravilloso castillo.
Donde se encuentra el castillo.
El castillo de Belalcázar es un lugar muy reconocible en la silueta de la localidad. Cuando vayáis por la carretera hacia el pueblo la vais a ver vengáis de donde vengáis.
El castillo se encuentra en un cerro al norte de la localidad de la Belálcazar, muy cerca del albergue de la localidad.
Aquí os dejo el mapa con su ubicación.
Descripción del castillo y su entorno
Fortificación exterior.
El castillo está enclavado en un cerro cercano a la población actual de Belalcázar, el recinto sobre el que se halla fue levantado por los musulmanes de la antigua Gafiq para proteger la villa de Gahet o Gaheta.
La fortaleza musulmana estaba emplazada en un meandro del arroyo Cagancha y presenta una planta irregular reforzada en la que podemos ver aun sillares romanos que los musulmanes empotraron en esa muralla para darle más consistencia al recinto.
Esta construcción irregular esta reforzada con torres cuadradas aunque prácticamente están derruidas, durante la reconquista fue reparada con una torre albarrana que tendremos justo enfrente de la puerta de entrada al castillo de Belalcázar.
Esta torre albarrana es maciza, y servía tanto para protección como para vigilancia, una de las características principales que tenía es que en la parte de abajo tenia algunos sillares que eran móviles, de modo que si el defensor se veía superado por el enemigo, podía retirarlos haciendo que la torre se derrumbara, aplastando al enemigo y entorpeciendo su paso de modo que tendrían más tiempo para atrincherarse en el interior del castillo.
Castillo de Belalcázar
Exterior
El castillo de Belalcázar es una fortificación de estilo gótico-militar sorprendente, es una mole construida para no ser derrumbada.
La visita al castillo de Belalcázar, comiena en el albergue junto al antiguo pilar donde se lababa la ropa, y ascenderemos por un camino restaurado hasta el cerro del castillo.
Construida con sillares de granito de las canteras cercanas ya que la zona es muy rica en este material, tiene una densidad en los muros que sorprende nada más llegar a sus pies.
Cuando los franceses tomaron la fortaleza durante la ocupación, tropas inglesas que vinieron a ayudarnos apostaron sus cañones frente a la puerta del castillo, todavía se ven las marcas que dejaron al dispararlos, pero el castillo no sufrió nada, tan solo unas pequeñas mellas en las paredes. Eso nos da una idea de lo sólida que es la construcción.
El castillo de Belalcázar está construido de manera trapezoidal, con la torre del homenaje (que os halare de ella un poco más adelante) construida en el centro de la muralla.
Además tiene cuatro torres en las esquinas y en la muralla de forma cuadrada, adarves y almenas en las esquinas y en los muros.
El castillo carece de troneras y ventanas saeteras para disparar cañones y flechas por lo que la defensa se haría desde las murallas.
Desde fuera destaca la puerta, un arco de medio punto con un alfiz, una puerta por la que según nos contaron los guías, cabía un hombre montado a caballo en altura y también la entrada para un carro, necesario para cuando llegaran los suministros.
Interior del castillo
El interior del castillo está en un estado muy deteriorado, aunque se intuyen partes valiosas que son de gran utilidad para los estudios arqueológicos, como pueden ser las canalizaciones que llevaban las aguas de lluvia hasta los aljibes, que permitirían abastecer de agua durante el asedio.
Este patio de armas tenía un claustro y una solería que poco a poco fueron desmontadas tanto por franceses para uso de materiales en otras partes, como por la misma población de Belalcázar, que como era normal usaron piezas del castillo para construir o reformar sus casas.
Ese claustro se puede apreciar aun en algunos arranques de arcos, pero si queremos ver uno parecido no tendremos que irnos muy lejos, basta con acercarnos al convento de santa clara de la columna y contemplar el que tienen allí, que es de la misma época y por lo tanto será como digo muy parecido.
Torre del Homenaje.
Esta impresionante mole de 47 metros de altura es el elemento más característico del castillo, con su altura se convierte en la torre más alta de la península ibérica, una construcción de granito que garantiza protección y vistas inmejorables a todo el lugar.
La torre tiene forma cuadrada en sus tres primeras partes, y el parte superior la torre cambia de forma dejando las esquinas más redondeadas.
Esta torre del homenaje tiene en su parte superior los escudos de los Sotomayor, en relieve, ya que este fue el que puso su patrimonio y sus inversiones para construir el castillo, como dato curioso, también podemos encontrar aquí en esta torre la representación de la familia Zúñiga.
Doña Elvira de Zuñiga se casó con Gutierre II de Sotomayor y ella también puso su patrimonio para la construcción del castillo, para verse representada su familia, en la parte que divide la cuadrada con la redondeadas hay una cadena que rodea todo el perímetro de la torre, esa cadena representa a los Zuñiga, originarios de Navarra y en cuyo escudo hay una cadena.
Como se accede a la torre
El acceso a esta torre se hace por el mismo patio hay una pequeña rampa que impide que pisemos el mismo castillo y esa misma nos introduce en la torre del homenaje.
Antiguamente cuando los señores del castillo tenían que entrar o salir del castillo lo hacían por una escalera monumental (hoy desaparecida) y que llevaba desde el patio hasta la tercera planta de la torre.
División de plantas de la torre:
La torre se divide en un total de 5 plantas desde la planta baja a la terraza, está construido de forma que en la planta inmediatamente inferior podemos encontrar el aljibe principal de la torre, para el abastecimiento de agua en caso de asedio.
Seguidamente y subiendo por la clásica escalera defensiva de caracol, llegaremos a la segunda planta, que debió de contiene algún tipo de almacén.
En la tercera panta, quizás una de las más importantes vemos que han completado el suelo, en esta planta, la que precede inmediatamente a la planta de los señores del castillo, se encuentra la puerta a la que daba esa escalera monumental de la que hablábamos al principio.
Esta escalera estaba aquí para que los condes de Belalcázar, no tuvieran que bajar o subir desde sus aposentos por las escaleras defensivas, si algún día visitáis el castillo y veis esa escalera sabréis el por qué.
En la cuarta panta, es donde residían los condes de Belalcázar, aquí vamos a ver que son estancias privadas que contienen los escudos de los Sotomayor y Zuñiga además de un escudo diferente, el de los Fernández de Córdoba, a quien la villa perteneció en algún momento.
Por último, llegaremos al mejor lugar para contemplar todo el paisaje, la terraza, la parte más alta de todo el castillo.
Desde aquí podemos ver a gran distancia, en un día claro con prismáticos podremos ver el castillo de Santa Eufemia y algunos de la zona cercana de Badajoz.
Además veremos todo el pueblo de Belalcázar, donde destacan la iglesia y el convento.
Fin de la visita al castillo de Belalcázar
Para finalizar la visita al castilllo de Belalcázar he de deciros que visitar el castillo con la visita guiada merece mucho la pena, ya que descubriréis el castillo de una forma que si realizar esta visita no sería posible, conoceréis curiosidades y disfrutareis de una mañana muy agradable.
Os dejo por aquí el link de la página donde podréis reservar las visitas, recordaros que las entradas salen para reservar los lunes y son totalmente gratuitas.
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“Como siempre, un saludo y nos vemos en el camino”
Pedro E. Juzgado.